lunes, 2 de julio de 2007

La caza y captura del alojamiento.

Ah, ese mundo maravilloso del negocio inmobiliario. Aquí estamos, enfrascados en la vorágine de la búsqueda de piso.
Analicemos las opciones:

- Piso compartido.

  • Ventajas: Precio económico incluso para pisos en el centro. Mayores posibilidades de encontrar uno disponible para tiempos menores de un año.
  • Desventajas. Todas la obvias de la convivencia con desconocidos durante un año... Más la aun más obvia de carecer de un espacio propio. Claro que luego los hay con menos privacidad que otros. Están aquellos maravillosos pisos donde la habitación viene con baño propio. Y los que no pues ya se sabe. Y lo más curioso son las condiciones. Porque ¿Porqué hay tantos pisos que ofrecen una habitación DOBLE para UNA persona? Al menos te suelen avisar de la cantidad de gente que vive en el lugar. Y cuando ves aquello de "4 people already living in the house", la idea de añadir 2 más (yo y mi pareja) a esa cifra resulta poco apetecible.

- Piso completo.

  • Ventajas. También bastante evidentes, la privacidad y libertad de vivir independiente. Sobre todo ahora que prácticamente salimos de casa de nuestros padres.
  • Desventajas. Precios desorbitados. En España lo de la vivienda está mal, y sí, en Irlanda hay mayor nivel de vida, pero es que el alquiler de un piso difícilmente baja de 1000 €. Que una vez estés trabajando allí pues supongo que es una carga soportable, pero de entrada asusta. Además de la dificultad de que alguien te alquile un piso cuando aun no tienes trabajo.

- Solución intermedia: Encontrar un piso compartido para los primeros meses hasta que tengas un trabajo y entonces alquilar un piso completo para un año. Ésta parece una opción lógica. Pero claro siempre piensas que si encuentras un piso entero ya desde el principio mejor.

Conclusión: Echamos a todo lo que caiga. O sea mandamos e-mails a gente que alquila pisos completos, habitaciones, por unos meses o por un año. Porque cuando uno busca piso en esta situación no eres tú el que elige el piso, es el casero el que te elige a ti. Entre aquellos que piden un mínimo de tiempo de alquiler, sólo mujeres, no parejas, gente con trabajo y los que prefieren eslovacos y polacos (sí, también los hay) pues quedan pocas opciones. Me recuerda a ir a comprar zapatillas con un número grande. No eliges un modelo, dices "sáqueme todas las que tenga del 46" y de ahí seleccionas la menos fea. Así que habrá que conformarse con algo menos de lo que te gustaría. Pero bueno, la aventura es la aventura, como dice mi padre, y no soy demasiado exigente.

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